Un tridente arrollador CR7, Benzema y Bale
El tridente del Real Madrid ofreció ante el Sevilla el recital que el madridismo llevaba esperando desde principios de temporada. A la regularidad del martillo de Cristiano se sumaron por fin la potencia de Bale y el fino instinto de Benzema, completando un marcador de otra época.
Lo de Cristiano dejó de ser noticia hace mucho tiempo. Cada partido del luso obliga a reescribir el libro de estadísticas del Real Madrid. El luso sumó ante el Sevilla su décimo octavo ‘hat-trick’ vestido de blanco, superó al legendario Ferenc Puskas como quinto máximo goleador en Liga del Real Madrid (158 dianas) e igualó a Diego Costa al frente de la tabla del Pichichi, con once tantos. También es el máximo goleador de la Champions (siete goles en tres partidos), lo que eleva su descomunal producción a 18 goles en 14 partidos con el Real Madrid. Su respuesta a la desafortunada intervención de Joseph Blatter en la noche del pasado lunes no pudo ser más contundente.
Benzema llegó a su gran noche por una vía más tortuosa. Silbado por la afición del Bernabéu durante varios partidos de la temporada, desplegó ante el Sevilla todo el repertorio al que apelan sus defensores a la hora de argumentar que es un delantero al que no se puede medir sólo en número de goles. Karim lubricó el ataque del Madrid con una gestión de los tiempos y los espacios para la videoteca. Dio un recital de movimientos ofensivos con y sin balón que, esta vez sí, coronó además con un buen doblete. Suma cuatro goles en Liga, complementados con otros dos en Champions. Un registro apreciable para un jugador que es más feliz dando una asistencia (lleva cinco) que anotando.