Durant e Ibaka, imperiales
Los Thunder, que se fueron al descanso con un parcial adverso de 59-73, vieron como en el tercer periodo el ataque de los Rockets desapareció y lo mismo sucedió en el cuarto para combinarse con sólo 19 puntos por 45 que logró el equipo de Oklahoma City.
Los responsables de la remontada, al margen de la figura de Durant, volvió a ser el ala-pívot congoleño, nacionalizado español, Serge Ibaka que fue una vez más la gran figura del equipo en el juego bajo los aros y aportó un doble-doble de 21 puntos y 15 rebotes.
Ibaka jugó 38 minutos, el segundo que más tiempo estuvo en el cancha, sólo superado por Durant (43 minutos), y anotó 10 de 13 tiros de campo, incluido el único triple que hizo, no fue a la línea de personal.
El jugador internacional español estuvo intratable bajo los aros, especialmente en el de los Thunder al capturar 11 rebotes defensivos, y puso cinco tapones espectaculares, que no tuvieron respuesta por parte de los hombres altos de los Rockets. “Me he sentido muy a gusto tanto en ataque como el defensa”, declaró a EFE Ibaka. “Creo que cada vez soy mejor jugador y lo demuestro en el campo, aunque tengo que seguir trabajando duro”.
Si Durant e Ibaka dominaron tanto en el juego exterior como interior, el base Reggie Jackson, que cada vez hace que se sienta menos la ausencia del lesionado Russell Westbrood, se convirtió en el segundo máximo encestador del partido al aportar 23 puntos, aunque falló seis de siete intentos de triples, y repartió cuatro asistencias.
Los Thunder (29-10), que volvieron al camino del triunfo y tienen seis en los últimos 10 partidos disputados, como equipo lograron un 46 (38-82) por ciento de acierto en los tiros de campo, y el 24 (6-25) de triples, comparados al 40 (33-82) y 35 (12-34), respectivamente, de los Rockets, que también perdieron el duelo bajo los aros al capturar 42 rebotes por 47 de Oklahoma City.
Después de una primera parte brillante por parte de los Rockets, que dominaron en todas las facetas del juego, en el tercer periodo comenzó su colapso ofensivo y los Thunder se aprovecharon para poner el empate el marcador antes que comenzase el cuarto (83-83).
Nada cambió en el cuarto y aunque ambos equipos fallaron indistintamente en sus respectivas posesión de balón durante mas de cinco minutos que los mantuvo sin distanciarse en el marcador, los Thunder lograron racha de 7-0, incluidos cinco conseguidos por Jackson, y a falta de cuatro minutos del final del tiempo reglamentario, Oklahoma se puso con ventaja parcial de 89-97 que sería la decisiva.
Los Thunder consiguieron otros cuatro puntos sin respuesta de los Rockets, incluido un mate de Jackson, tras jugada de recuperación de balón y saque rápido, y ahí se acabó el partido a falta de menos de dos minutos (92-103).
El escolta James Harden, exjugador de los Thunder, y el ala-pívot Terrence Jones aportaron 16 puntos cada uno que no impidieron la derrota de los Rockets (26-15), que rompieron racha de tres triunfos consecutivos.
Mientras que el pívot Dwight Howard tampoco pudo ser factor ganador en el juego de los Rockets al ver como la defensa de los Thunder impuso su poder bajo los aros y de ahí que se quedase con sólo 11 tantos (5-13, 0-0, 1-2), capturó ocho rebotes, puso tres tapones y dio dos asistencias.
El ala-pívot lituano Donatas Motiejunas fue el sexto jugador de los Rockets al aportar 15 puntos y siete rebotes, mientras que el alero Chandler Parsons aportó 14 tantos y el base Aaron Brooks, que también salió del banquillo llegó a los 11.
El escolta-alero dominicano Francisco García aportó tres puntos (1-3, 1-3, 0-0) en los nueve minutos que jugó con el equipo de Houston.
Los Rockets, que establecieron la mejor marca de la temporada en la primera parte al anotar 73 puntos, incluidos 41 en el segundo cuarto, luego vieron como los 19 de la segunda los dejó con la peor diferencia que ha nunca en la historia de la NBA.
“La verdad es que nunca había visto algo así en mi carrera profesional”, admitió Scott Brooks, entrenador de los Thunder. “También pienso que no volverá a suceder en breve”.
Por su parte, el entrenador de los Rockets, Kevin McHale, se limitó a decir que el equipo había fallado todo lo que tiraba a canasta sin que hubiese un motivo concreto para que eso sucediese.
“Hicimos una buena defensa, pero nada de lo que intentábamos en ataque nos resultó y tal vez la única explicación de que eso sucediese es que no movimos bien el balón”, valoró McHale. “No es normal tener 12-19 de acierto en los tiros durante la primera parte y fallar los 14 que hicimos en la segunda”.