Nadal-Ferrer, la final de 2013 vuelve en cuartos de final
Rafael Nadal cuidó su espalda tocada de la mejor manera posible, de cara a plantarse en su sus novenos cuartos de final en Roland Garros (en racha de cinco): fue con un entrenamiento con público en la Philippe Chatrier ante el serbio Dusan Lajovic, número 83 de la ATP (y actual dos de Serbia en la Davis), al que Nadal barrió de la Chatrier y del torneo en solo 93 minutos: 6-1, 6-2, 6-1. Nadal jugó con dos vendajes protectores en la zona lumbar, que dio sensación de hallarse muy mejorada, y llegó a sacar a una punta de 192 km/h. La media de su primer servicio fue de 173 km/h y la del segundo, 139. En ambos casos, Rafa mejoró en ocho km/h las medias que obtuvo en la ronda anterior, ante Leo Mayer.
En los dos primeros sets ante el desbordado Lajovic, Nadal había ganado el 100% de puntos con sus primeros servicios, de los que al fin puso en pista el 63%. Ese ‘pleno’ de puntos ganados con primeros saques (solo en torno al 40% de aciertos en los dos sets iniciales) se quedó en un porcentaje final de 81%: era muy difícil mantener la concentración e intensidad ante un rival sometido desde el minuto uno: Nadal quebró el saque a Lajovic en ocho de las diez oportunidades de que dispuso, por el sencillo método de desmontar una y otra vez el revés a una mano del serbio. Nadal nunca ha perdido con ningún otro serbio… que no sea Djokovic y ahora se enfrentará en cuartos y en reedición de la final de 2013 a un pletórico David Ferrer, que despidió al sudafricano Anderson.
“Lajovic ha hecho un gran toneo, aunque puede haberle pesado jugar por primera vez en una pista tan grandes como la Chatrier. He sabido controlar desde la línea de fondo, he sacado bien y me voy feliz con mi partido. Con David vamos a repetir la final del año pasado aquí en Roland Garros y sólo se puede decir que espero un gran partido contra un gran jugador”, señaló Nadal sobre la misma tierra de la Chatrier.
Antes, y al derrotar en cuatro sets (6-3, 6-3, 6-7, 6-1) al sudafricano Kevin Anderson, David Ferrer se convirtió en el segundo español con más victorias en Roland Garros, empatado a 36 victorias con Alex Corretja. Sin embargo, Ferrer ofrece sólo 11 derrotas, por las 13 de Corretja, retirado en la década anterior. Rafael Nadal lidera la lista, ya con 63 victorias y una derrota. Manuel Santana firmó 34 victorias y cinco derrotas. El triunfo de Ferrer ante Anderson se consumó después de dos horas y 51 minutos de combate en la Pista Suzanne Lenglen. Hubo varias cifras clave del éxito de Ferrer al restar el saque-cañón de Anderson: el gigante sudafricano (2,03) sólo ganó el 40% de puntos con su segundo servicio. Aperreado por el esfuerzo y los ángulos de Ferrer, Anderson incurrió en 40 erores no forzados (Ferrer, 24), y David incluso le superó en tiros ganadores: 47-40.
En estas condiciones, ni siquiera nueve saques directos bastaron al sudafricano para escapar de la cuneta, aunque su potencia de servicio (punta a 215 km/h) sí le valió al menos para conquistar el tercer set en ‘muerte súbita’. Ferrer lo arregló de inmediato, al demarrar hasta un 5-0 mortal en el cuarto set, cerrado con 6-1 para el español. Desde septiembre de 2011, en el US Open, Ferrer no ha perdido antes de los cuartos en ningún torneo de Grand Slam. Así que esta se trata de su décima aparición consecutiva en cuartos de Grand Slam.
Ferrer ha ganado dos de las tres últimas veces que han jugado. “Si está Rafa, sólo se trata de disfrutar del partido: él me ha ganado a mí más veces que yo a él… y estamos en los cuartos de un Grand Slam. El partido con Anderson parecía fácil después de los dos primeros sets, pero era por los pequeños detalles: él siempre estuvo muy cerca de mí, ha sido duro y he tenido que luchar hasta el final”, resumió David Ferrer aún sobre la Pîsta Lenglen