Robben desnivela un discreto debut del Bayern Münich
El Bayern se subió a lomos de Robben para arrancar con victoria su andadura en la Bundesliga. No fue un debut brillante. Al contrario. Mucho deberá mejorar el conjunto bávaro para llegar a su verdadero nivel, el que se presupone que le da para ganar cualquier torneo en el que juega. Guardiola alineó una defensa con cuatro hombres, a diferencia de los tres que había empleado durante toda la pretemporada y también en la derrota en la Supercopa alemana ante el Dortmund. Volvió Badstuber al eje de la zaga año y medio después de su lesión y el centro del campo fue para Alaba, lateral izquierdo habitual pero mediocentro en sus inicios y en la selección austriaca, y el jovencísimo Gaudino, la última creación del técnico catalán.
Al Bayern le faltó frescura para crear, sobre todo porque el Wolfsburgo presionó muy arriba, y aún así Gaudino dejó detalles de gran clase para sus 17 años de edad. Un pase suyo al corazón del área lo remató con un escorzo Mandzukic, que se topó con un fundamental Grun en la mejor ocasión bávara en la primera media hora. No estaba cómodo el actual campeón de la Bundesliga pero mantenía a Robben pegado a la banda derecha a la espera de alguno de sus habituales desequilibrios. Y llegaron, por supuesto. En uno de ellos, al final casi de la primera parte, encaró hacia fuera y puso un balón raso con la derecha que empujó Müller llegando desde atrás. Sin ser un delantero al uso, el alemán mantiene sus cifras goleadoras con la naturalidad de los elegidos. Pocos tienen su sencillez para ver portería contraria.
