Tradición perdedora de Atlanta, ‘maldición’ de Falcons ante Pats
El Super Bowl LI no solo enfrentará a un equipo ganador con otro perdedor, sino también a dos ciudades que han vivido situaciones opuestas en el deporte. Por un lado Boston, que cuenta con franquicias gloriosas en la NFL, NBA, MLB y la NHL; y en la otra cara, Atlanta, que solo una vez ha podido celebrar un éxito de sus grandes escuadras.
Los Patriots fueron por mucho tiempo un equipo más en la NFL hasta que Bill Belichik y Tom Brady ganaron su primer Super Bowl en la temporada 2001. A partir de ahí, construyeron una dinastía y han dominado su liga en el siglo XXI, con cuatro trofeos de Super Bowl, siete títulos de la Conferencia Americana y 14 títulos de división.
En contraste, los Atlanta Falcons solo han jugado un Super Bowl en los 51 años que llevan dentro de la NFL (lo perdieron ante los Broncos). El título de la Conferencia Nacional que le ganaron a Green Bay este año es apenas el segundo en sus vitrinas. Únicamente en 16 de sus 51 temporadas en la liga terminaron con marca ganadora.
Desde 2001 hasta 2017, los Patriots nunca han tenido récord perdedor en la fase regular, ni siquiera en 2008 cuando Brady se perdió toda la temporada por lesión. Por su parte, los Falcons han concretado siete campañas con marca negativa en el mismo periodo.
Si se trata del basquetbol, la diferencia es aun más apabullante. Boston tiene a la franquicia más laureada de la NBA: los Celtics, que presumen 17 trofeos en su palmarés. Tan desdichada es Atlanta que el único campeonato de los Hawks fue cuando el equipo estaba en St. Louis; desde que se cambiaron de ciudad, nunca han llegado a la final y solo han jugado dos veces las finales de conferencia.
Atlanta tuvo a su mejor generación de deportistas en las Grandes Ligas. Los Braves fueron una potencia en los 90 de la mano de figuras como Gregg Maddux, Chipper Jones, Tom Galvine y John Smoltz. Sin duda fueron uno de los mejores equipos de la década en la Gran Carpa, pero de cuatro Series Mundiales solo ganaron la de 1995.
De otro lado, está una de las franquicias de mayor abolengo en las Mayores: los Red Sox. Si bien los de Boston sufrieron la llamada Maldición del Bambino, una sequía de 86 años sin títulos, desde que rompieron su mala racha en 2004, han ganado un total de tres títulos y son la franquicia más ganadora en los 2000, junto con los St. Louis Cardinals. Por si fuera poco, sus vitrinas guardan ocho trofeos de campeón.
Los Boston Bruins también saben ser campeones y han capturado la Copa Stanley en seis ocasiones, las dos más recientes en 2011 y 2013. Son la cuarta franquicia con más títulos en su liga, aunque están muy lejos de las primeras tres. Por otro lado, Atlanta no tiene equipo en el hockey profesional de Estados Unidos; los Atlanta Trashers jugaron en la NHL entre 1999 y 2001, lo máximo que lograron fue una corona divisional.
La única franquicia de Boston que nunca ha alzado un trofeo de campeón es el New England Revolution de la MLS, mientras que Atlanta apenas entrará a la liga de futbol en la temporada 2017.