Aspirante contra campeón
En esta semifinal netamente latinoamericana, Argentina pondrá a prueba su ambición de ceñirse la corona ante la vigente campeona. México, que empezó con mal pie, ha enderezado el rumbo y ahora aspira a revalidar sus laureles.
Argentina es la intrusa de estas semifinales. Y no es por su condición de selección legendaria, ni por su rendimiento en este certamen, nada de eso. Es por que es el único combinado en liza que no proviene del Grupo F. Además, es la primera vez desde 2003 que llega tan lejos en la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA. Tras un comienzo algo dubitativo contra Irán y Austria, la Albiceleste se fue consolidando poco a poco como una seria candidata al título, y a día de hoy sigue siendo, junto con Nigeria, la única formación invicta en el torneo. Impresionantes por su eficacia y solidez frente a Costa de Marfil en cuartos, los sudamericanos deberán imponerse a la vigente campeona para lograr el pase a la primera final de su historia.
México, por su parte, tuvo un arranque catastrófico en Emiratos Árabes Unidos 2013, con una humillante derrota a manos de Nigeria. Sin embargo, se rehizo y recuperó los valores que permitieron a la promoción anterior triunfar en casa hace dos años. El Tri dejó mudos a los escépticos al salir airoso contra el otro gigante sudamericano en cuartos. Su defensa aguantó las acometidas de Brasil antes de llevarse el gato al agua en una interminable y emocionantísima tanda penal. Tras haber superado todos los obstáculos a su paso, los pupilos de Raúl Gutiérrez son más peligrosos que nunca.
“Me impresionó mucho la victoria de México contra Brasil. Para mí será un encuentro especial, porque dirigí a la selección mexicana sub-17 en Finlandia 2003. Siempre es un duelo particular entre los dos países, sea cual sea la categoría”. Humberto Grondona, seleccionador de Argentina.