Botafogo, en cuerpo y alma
Te presentamos al hombre que se describe a sí mismo como “el mayor fan del Botafogo”, ¡y tiene 83 tatuajes para demostrarlo!
“Nací botafoguense”, explica Delneri Martins Viana, un soldado jubilado de 69 años. “Me crié viendo a futbolistas como Manga, Nilton Santos, Didi, Zagallo, Quarentinha, Garrincha y Amarildo en uno de los equipos más colosales del fútbol carioca. Después, tuve la suerte de ver cómo Gerson, Paulo César Caju, Jairzinho y Tulio Maravilha llevaban al Botafogo hasta la gloria en el Campeonato Brasileño de 1995”.
Delneri se hizo el primer tatuaje (en homenaje a Garrincha) hace 14 años. Inmediatamente le pilló el gusto a la tinta. Actualmente, tiene el cuerpo cubierto de lemas, antiguos jugadores e insignias del Botafogo; incluso lleva tatuado a Briba, el perro que Carlito Rocha, el antiguo presidente del Fogão, llevó a los partidos, infringiendo las reglas del club, y terminó dando suerte al equipo.
Un cartel situado en la puerta de la casa que Delneri comparte con su esposa, Malvina Gonalves, en Bangú, un barrio de Río de Janeiro, reza: “Bienvenidos, pero con la condición de que no hablen mal del Botafogo”.
La pareja ha convertido su hogar en un auténtico altar al club conocido con los sobrenombres de El Glorioso y La Estrella Solitaria.
Delneri procura asistir a todos los partidos del Botafogo, tanto en casa como a domicilio, y a menudo lo acompañan sus hijas, Glaucia y Marcela, tan apasionadas como él. “Pero ellas solamente se han hecho unos diez tatuajes cada una”, asegura el padre con total naturalidad.
