Cuando lo perfecto se mejora
¿Qué se puede decir más de un juego de Naruto que comienza, en una de sus modalidades, con dos combates que suceden de forma simultanea en los que se enfrenta el Cuarto Hokage, Minato, contra Uchiha Madara, por un lado, y contra el Nueve Colas, por el otro? Cualquier amante del manganime ya dejaría de leer este artículo y se pondría o bien a jugar de nuevo, o bien se iría a comprarlo de forma inmediata. Nada podría dar al traste con Naruto: Ultimate Ninja Storm 3.
El juego desarrollado por CyberConnect 2 y distribuido por Namco Bandai para PS3 y Xbox 360 nos devuelve a la esencia de los anteriores títulos pero dando un paso más adelante, gracias, principalmente, a lo grandioso de sus batallas, la belleza de sus escenarios, la variedad de los personajes y la gran cantidad de objetos a nuestro alcance (cartas, ítems, títulos honoríficos, secretos…). Es un juego de acción y aventura cuyo escenario, la Cuarta Guerra Ninja, mantiene la esencia del manganime creado por el genio japonés Masashi Kishimoto, a pesar de algún que otro flashback hacia el pasado de la Aldea Oculta de la Hoja y alguna que otra licencia artística.
Todas estas características se nos presentan en el nuevo modo de historía, “Aventura Definitiva”. Los personajes a nuestro alcance pueden llegar a ser unos 80 al final (comenzaremos con 25 más o menos), entre los que encontramos al Tercer y Cuarto Hokage o Sasuke, por no hablar del propio Naruto, y tendrán que escoger una de las diferentes rutas que se nos presenta por el camino (“Héroe” o “Leyenda”), Ambas sendas nos permiten una mayor vida del juego al tener que repetir estas elecciones para participar en todos los eventos y luchas que se nos ofrece.
Pero lo que más llama la atención es la libertad de movimiento y, como no, las batallas. Ambas acciones llevan existiendo en estos juegos desde que el mundo es mundo, pero el atractivo del libre albedrío en el desplazamiento reside en la belleza de los escenarios que CyberConnect 2 nos muestra. Gran variedad y vida en ellos, y lugares conocidos por todos los manganimeadictos como Konoha, el Bosque de la Muerte, la Atalaya o la guarida de Akatsuki, entre otros. También la posibilidad de interacción con otros personajes, la compra de objetos esenciales para llevar a cabo nuestras misiones o la realización de tareas principales y secundarias.
