Con un gol de táctica fija Olimpia derrotó 1-0 a Motagua en una nueva edición del clásico nacional, que estuvo cerca de irse sin goles, pero un certero cabezazo del zaguero Davirson Castillo al 85’ decidió el enfrentamiento a favor de los Blancos que mantienen el liderato del torneo Apertura.
Los clásicos es más importante ganarlos que jugarlos bien, algo que entiende el técnico Nahúm Espinoza a la perfección, quien alineó a un equipo con mayores características de corte defensivo que ofensivas.
La estrategia táctica le resultó al DT olimpista, pues su equipo sigue sumando puntos, aunque el juego colectivo de los Albos aún no ha desarrollado todo su potencial.
Motagua tuvo el balón, la posesión en un gran porcentaje fue de los azules, pero el gol fue olimpista, una acción a balón parado fue la llave que rompió la disciplinada marca de ambos conjuntos.
Más de 30 minutos debieron trascurrir para que se diera el primer remate al marco. El clásico capitalino fue un típico choque en el que se pensó más en defender el marco propio que ir en busca de derrotar el contrario.
Las “Águilas” tuvieron más posesión del balón, pero con muy poca profundidad, y sin progresar en ataque, carecieron de argumentos futbolísticos para trasformar eso en anotaciones.
Fue un partido que no presentó exigencia a los guardametas, pues en el gol nada pudo hacer el meta Jonathan Rougier.
La jugada que puso a festejar a la afición Merengue dejó en evidencia la gran importancia que tiene hoy día la táctica fija: Davirson Castillo aprovechó la falta de atención de la zaga motaguense, que se preocupó más por cuidar al espigado Carlo Costly, y así llegar a rematar sin marca y establecer de cabeza el definitivo 1-0 al minuto 85.
Con este triunfo Olimpia es líder con 13 puntos, seguido de Motagua con nueve. Los Blancos se mantienen invictos después de cinco fechas.
