Ecuador obligada ante una desahuciada Bolivia
La selección ecuatoriana de fútbol, necesitada de restablecerse de la derrota sufrida en Barranquilla, se enfrentará a Bolivia, que solamente se juega el honor, pues ha vuelto a quedar al margen de un Mundial.
Ecuador ha quedado en el cuarto puesto con 21 puntos tras caer por 1-0 ante Colombia el pasado viernes, mientras que Bolivia sufrió una estrepitosa derrota por 4-0 ante Paraguay, se hundió en el último lugar de la clasificación con tan sólo diez puntos y ya no tiene posibilidades de lograr una plaza en la fase final de Brasil 2014.
El equipo dirigido por el colombiano Reinaldo Rueda no podrá contar en La Paz con el defensa Gabriel Achilier, expulsado en Colombia, y el delantero Joao Rojas, suspendido por acumulación de tarjetas amarillas.
No obstante, Rueda recuperará al guardameta Alexander Domínguez y al artillero del equipo, Felipe Caicedo, única referencia de garantías en ataque tras la trágica desaparición de Chucho Benítez.
El centrocampista de la Liga de Quito Luis Saritama reconoció que con Bolivia, su selección se juega “muchas cosas”, por lo que esperan pasar página tras la derrota con Colombia.
“Sabemos que Bolivia irá por su honor, pero nos vamos por los tres puntos que nos permitan mantener la opción del Mundial”, dijo.
El técnico de La Verde boliviana, el español Xabier Azkargorta, anunció seis cambios en el equipo titular con respecto al del pasado viernes en Paraguay.
Uno de los principales cambios será el del arquero Sergio Galarza, quien podría ser reemplazado por el juvenil Romel Quiñónez, y también se esperan diversas variantes en la media cancha.
Está en duda la participación de Marcelo Moreno Martins, delantero del Flamengo brasileño, quien estuvo ausente en la práctica del domingo a causa de un resfriado.
En su lugar, el entrenador vasco probó la dupla atacante compuesta por los jugadores del Bolívar Rudy Cardozo y Juan Carlos ‘Conejo’ Arce.
Los bolivianos, que disputarán su último partido de locales, buscarán el triunfo en casa para despedirse con dignidad de las eliminatorias.