El Benfica gana al PSG, pero el triunfo del Olympiacos le elimina
El Benfica ganó hoy al París Saint Germain (2-1), pero no se clasificó a los octavos de la Liga de Campeones por la victoria del Olympiacos ante el Anderlecht, que sitúa a los lusos en Liga Europa, torneo del que son actuales subcampeones.
El uruguayo Edinson Cavani (37) inauguró el marcador, pero el brasileño Lima (44, de penalti) y del argentino Gaitán (58) dieron al Benfica un merecido triunfo ante un PSG ya clasificado como líder y que no alineó a algunas de sus figuras, como el sueco Zlatan Ibrahimovic o el brasileño Thiago Silva.
A pesar de sumar 10 puntos, los mismos que el Olympiacos de Míchel, los portugueses acaban terceros del grupo C por su desventaja en el choque directo con los griegos, que ganaron en su casa y empataron en el estadio Da Luz.
La obligación puntuar ante el PSG llevó al Benfica a poner en marcha una estrategia arrojada. Apostó en el ataque en banda con la participación de sus laterales (Maxi Pereira y Sílvio) y en el juego interior que brindan los argentinos Nico Gaitán y Enzo Pérez y el serbio Nemanja Matic.
La elección ayudó a crear varias ocasiones, pero también propició los contraataques parisinos.
Un equipo que contó en su once con jugadores como el argentino Javier Pastore, el brasileño Lucas Moura, el francés Jérémy Ménez y Cavani es capaz de golpear en cualquier momento.
A pesar de que los primeros remates fueron locales -Enzo Pérez y Silvio-, Ménez avisó con claridad en un primer contragolpe que ejecutó con precipitación.
El lateral zurdo Digne -aprovechó los espacio concedidos en la derecha por el uruguayo Maxi- decidió después disparar en vez de centrar al punto de penalti.
Transcurrida media hora, el Benfica recuperó el mando de los pies de Gaitán. El argentino, a pierna cambiada desde la derecha, probó a Sirigu a pase de Maxi, mucho mejor en tareas ofensivas que defensivas.
Poco después, los locales pidieron un penalti por supuesta mano del central brasileño Marquinhos.
La valentía condujo al Benfica a exponerse demasiado a la dinamita del PSG. Cavani, que había desperdiciado una ocasión de remate por optar por rizar el rizo, adelantó a los visitantes en un córner en el 37.
Javier Pastore ganó un balón suelto y cruzó raso al palo derecho, donde Ménez centró y Cavani empujó a escasos palmos de la línea de gol. La defensa portuguesa pecó de blanda.
Cavani, controlado por el gigantón Luisao en varias fases del encuentro, había conseguido por fin imponer su jerarquía en el área.
El Benfica no se amilanó y respondió con firmeza siete minutos más tarde. El lateral Sílvio, cedido por el Atlético de Madrid, fue objeto de penalti al sufrir un cabezazo del maliense Traoré.
Lima definió con un chute fuerte a media altura de Sirigu, que había adivinado la dirección del balón.
Al intervalo, el gol rondaba del costado luso. Gaitán remató muy desviado y a Lima, en carrera y sin oposición, le detuvo Sirigu un chute tenso, pero sin colocación.
Al toque y la garra de Enzo, el dominio de los encarnados se intensificó.
El PSG lanzó el primer contraataque de la segunda parte por la banda derecha del brasileño Moura. Su centro, sin embargo, no cobró la dirección deseada.
No se demoró el Benfica en justificar su superioridad. Enzo combinó con Maxi y el centro del uruguayo lo repelió Sirigu al medio, donde Gaitán remachó a las redes.
En ese momento el triunfo acercaba a los portugueses a los octavos. Un empate del Olimpiacos ante el Anderlecht belga le concedía el pase.
El tercero lo acariciaron los locales gracias a un pase interior de Matic, desaprovechado por el serbio Lazar Markovic y después por Lima, indeciso en el momento del remate.
El argentino Ezequiel Lavezzi, reemplazo de Cavani, estuvo cerca de reponer la igualdad, pero no ajustó lo suficiente el remate.
El Benfica estuvo en los últimos minutos más pendiente de Grecia que del choque de Lisboa. Sin embargo, no llegaron buenas noticias para los portugueses, ya que el Olimpiacos venció 3-1.