El brillo del oro blanco
La historia del Balón de oro va íntimamente ligada a la vida del Real Madrid y de la Copa de Europa. La revista gala France Football instituyó el trofeo en 1956 y el primer ganador fue un futbolista inglés, Stanley Matthews, jugador del Blackpool y de la selección inglesa. En segunda y tercera posición ya aparecieron dos jugadores del Real Madrid, Di Stéfano y Kopa.
Era el preámbulo del dominio del fútbol español, que conquistó el galardón los cuatro años siguientes: Di Stéfano (1957 y 1959), Kopa (1958) y Luis Suárez (1960). Dos madridistas y un barcelonista. Ningún futbolista nacido en España ha vuelto a conquistarlo desde entonces, pero sí lo han hecho cuatro jugadores del club blanco: Figo (2000), Ronaldo (2002), Cannavaro (2006) y, este lunes, Cristiano Ronaldo (2013).
Los tres primeros lo consiguieron en su primera temporada en el Bernabéu, donde llegaron, respectivamente, procedentes del Barcelona, Milán y Juventus. Otros cuatro futbolistas, que terminaron vistiendo de blanco, ya lo habían ganado con anterioridad: Zidane (1998/Juventus), Owen (Liverpool/2001), Kaká (Milan/2007) y el propio Cristiano (Manchester United/2008).
Siete platas y cinco bronces
El palmarés del prestigioso premio ha visto cómo otros jugadores madridistas han ocupado posiciones de privilegio. Di Stéfano y Kopa fueron plata y bronce en 1956. Kopa, bronce en 1957; Puskas, plata en 1960; Amancio, bronce en 1964; Butragueño bronce en 1986 y 1987; Mijatovic, Suker, Raúl, Roberto Carlos y Cristiano Ronaldo, plata en 1997, 1998, 2001, 2002 y 2009.
Di Stéfano, dos más uno
Alfredo di Stéfano nunca concedió un valor especial a este trofeo individual en comparación con los éxitos colectivos. Lo que no quiere decir que no se sienta orgulloso de haberlo ganado en dos ocasiones en su plenitud como futbolista y un tercero, el Superbalón de oro, cuando el trofeo cumplía sus 25 años en 1989. Era el reconocimiento a toda su carrera profesional y fue el más votado por delante de Cruyff, Platini y Beckenbauer: “Al fútbol jugábamos once y premiar a uno siempre podía acarrerar una injusticia. ¿Por qué no ganaron nunca este trofeo Puskas o Gento? Sin sus pases y el trabajo de todos los demás yo nunca lo hubiera merecido. Al fútbol no se gana para ganar estos premios sino títulos. Yo los gané porque el Real Madrid era el mejor equipo de Europa en aquellos tiempos”. Conquistó los dos trofeos con holgura. En 1957, sumó 72 puntos por los 19 de Wright y en 1959, 80 por los 42 de Kopa.
Kopa, Mundial y angulas
El delantero francés tuvo que esperar a su primera temporada completa en el Real Madrid para ganar el oro, aunque él siempre haya considerado que mucho tuvo que ver en ello su brillante actuación con Francia en el Mundial de Suecia 58, donde fue tercera.
Di Stéfano cuando le escuchaba ese argumento, confesaba que el gran secreto del francés eran “las raciones de angulas que se comía. Eso es lo que le hizo ganar realmente… además de lo buen jugador que era. Le dabas el balón y te lo guardaba para dártelo siempre en ventaja para marcar”.
Kopa proclama que en “aquel Real Madrid estaba prohibido perder. Me costó adaptarme al llegar, me dieron el ‘7’, que era como decirme que era un poste a la derecha porque el equipo jugaba siempre por la izquierda. Allí estaba Gento”.
Figo ganó a Zidane
Fue el broche de oro a su fichaje por el Real Madrid aquel año 2000 y ganó el oro a Zidane por tan sólo 16 votos. Habían pasado 35 años del triunfo de Eusebio y en su país se valoró especialmente el premio por el hecho de haber jugado media temporada en el Barça y media en el Real Madrid: “Cuando leí en la prensa catalana que era un justo vencedor, me di cuenta de que había hecho realmente méritos para ganarlo”.
El segundo de Ronaldo
El brasileño ya había ganado el trofeo en 1997, siendo jugador del Barcelona: “Si tengo que ser sincero, me lo esperaba porque había ganado el Mundial y además había sido máximo goleador. Me enteré de que lo había ganado viajando con el Real Madrid a la final de la Intercontinental. Se lo quería contar a mis compañeros e iban todos durmiendo. No pude compartir con nadie la alegría hasta que no se despertaron”.
Cannavaro, tercer defensa
También Cannavaro se asomó al primer puesto gracias a que la selección italiana ganara el Mundial. Justo después del título fichó por el Real Madrid. Se convertía en el tercer defensa en ganar el trofeo en la historia después de los alemanes Beckenbauer ySammer: “La verdad es que si no lo habían ganado Baresi o Maldini pensé que no lo podía ganar nadie, pero está claro que en mí, más que nunca, recayó el premio a un equipo que había ganado algo muy importante. Por eso Buffon fue segundo”, señaló el central transalpino. Con Di Stéfano de testigo ofreció el trofeo al Bernabéu