El mejor trío ofensivo de la NBA juega en… Sacramento
No es el big three de los Heat, ni el de Oklahoma ni el de los Blazers o los Clippers, el trío más ofensivo de la NBA juega en los Kings. Sacramento es el único equipo de toda la Liga que puede presumir de contar con tres jugadores que promedian más de 20 puntos por partido: DeMarcus Cousins (22,4), Isaiah Thomas (20,6) y Rudy Gay (20,3). Con ellos tres en pista, en el quinteto más usado hasta ahora por Sacramento, junto a Thornton (traspasado a los Nets) y Thompson, que ha coincidido en pista durante 228,2 minutos, Sacramento ha sumado un 63,1% de incidencia en sus victorias. Y en el segundo, con McLemore en lugar de Thornton (200,3), el 47,0%. Más de 60 puntos por partido para los Kings.
Ni siquiera en su etapa dorada más reciente, a principios de siglo con Webber, Stojakovic, Williams y Divac, entre otras figuras, tuvieron los Kings tres anotadores por encima de los 20 puntos de media. De hecho no los han tenido al mismo tiempo hasta ahora en toda su historia. Y eso que tuvieron anotadores de la talla de Oscar Robertson, en su época como Cincinnati Royals, Tiny Archibald cuando se trasladaron a Kansas City, y Mitch Richmond y el propio Webber, ya en Sacramento.
En la historia de la NBA ha habido tríos muy potentes en ataque, como el de los Warriors de la campaña 90-91: Chris Mullin (25,7), Mitch Richmond (23,9), y Tim Hardaway (22,9); el de los Sonics de la 86-87 y 87-88, con Ellis (24,9 y 25,8), Chambers (23,3 y 20,4) y McDaniel (23,0 y 21,4); o el de los Lakers de la 80-81: Kareem Abdul-Jabbar (26,2) Jamaal Wilkes (22,6) y Magic Johnson (21,6). Pero en los años más recientes, la cosa ha ido más bien de dúos míticos: Jordan y Pippen en Chicago; Stockton y Malone en Utah; Bryant y O’Neal en los Lakers… Y el último gran big three, el ya de LeBron, Wade y Bosh en Miami, no lo ha logrado aún.
Desgraciadamente, el buen rendimiento de Cousins, Thomas y Gay no está sirviendo para que la franquicia californiana haga una buena temporada, lejos de los playoffs en el Oeste con un pobre balance de 20-36. Y eso ocurre porque el resto de su plantilla está a una distancia sideral de sus tres estrellas. De hecho, ninguno más llega a las dos cifras en anotación. Derrick Williams, con 9,6 puntos es el que más se acerca, seguido por Ben McLemore y Jason Thompson, con 7,6. Jimmer Fredette, decepcionante, está en 5,9.
Pese a su mala situación clasificatoria, los Kings, gracias a su trío atacante, son el decimotercer mejor equipo de la NBA en anotación con 101,3 de media por partido. El mejor en ese aspecto es Portland, con 107,8 y Aldridge (23,9), Lillard (21,2) y Matthews (16,9). Detrás están los Clippers, en 107,3 con Griffin (24,3), Crawford (19,1) y Paul (19,0); los Rockets, 106,1 con Harden (24,3), Howard (18,8) y Parsons (17,1); los Wolves, 105,6 con Love (26,5), Martin (19,0) y Pekovic (18,0). Y algo más lejos los Thunder, 104,8 con Durant (31,6), Westbrook (20,8) e Ibaka (15,1); y los Heat, 104,1 con LeBron (26,9), Wade (18,8) y Bosh (17,1).
La diferencia es que en estos equipos hay un cuarto jugador y hasta un quinto o sexto que sube la media. En Portland lo hacen Batum (12,8) y Lopez (10,7); en los Clippers, Redick (15,7), Jordan (10,2) y Collison (10,0); en Houston, Lin (12,8) y Jones (11,6); en Minnesota, Brewer (11,5); en Oklahoma, Jackson (13,4). La excepción entre los mejores es Miami, con más diferencia entre su big three y el siguiente mejor anotador, Chalmers (9,8).