Esperanza compartida
En la reciente doble fecha de las Eliminatorias sudamericanas, correspondientes a las jornadas 11 y 12 rumbo al Mundial, ninguno de los equipos que jugaron los dos encuentros consiguió puntaje y rendimiento ideal.
De hecho, fueron pocos los casos en que se evidenció mucha superioridad entre un equipo y otro. Las excepciones fueron el 3-0 de Argentina ante Venezuela, el 5-0 de Colombia a Bolivia y el 4-1 de Ecuador a Paraguay. En el resto de los partidos prevaleció la paridad.
Con Bolivia y Paraguay despegados en la zona baja, hay siete selecciones que mantienen esperanzas. Es un buen momento para analizar en qué estado se encuentra el sueño de cada una de ellas de llegar a Brasil 2014.
ARGENTINA (24 puntos / 11 partidos)
Sin haber jugado un gran partido en el Monumental, el conjunto de Sabella logró un contundente 3-0 sobre Venezuela, porque cualquiera de sus jugadores puede agarrar la pelota y generar algo. Eso sí, cuando la agarra Messi no sólo genera, sino que también concluye. Tanto su selección como Barcelona son muy dependientes de Leo y de sus momentos. Ambos equipos tienen que rogar que no le pase nada.
A esta altura, seguir hablando de Messi es una estupidez. Por eso me gustaría destacar también a Higuaín, quien confirma toda su capacidad goleadora. Para el DT del Real Madrid, la prioridad es Benzema. El francés quizás sea más útil en el juego colectivo, más elegante en sus gestos técnicos. Pero el argentino es más goleador. No por nada fue el máximo artillero de la Albiceleste en el último Mundial y lo es actualmente en las Eliminatorias. Está entre los mejores atacantes del mundo.
Respecto a su segundo compromiso, viajó a La Paz con la idea de no perder. Esperó con mucha gente en defensa, achicando espacios y pasando al ataque con tres futbolistas veloces. Di María se tiró atrás, a su estilo. Palacio se adaptó en la altura. Estuvo solitario y no jugó del todo bien, pero le fue útil al equipo. En otras condiciones, Argentina se hubiera llevado la victoria.
Tenía bien en claro que la altura es un enemigo, al cual no se puede ignorar. Lo llamativo es que algunos jugadores que sufrieron el categórico 1-6 de la eliminatoria pasada, presentes en este 1-1, se refirieron a los efectos adversos de los 3600 metros sobre el nivel del mar. En aquel momento había que decir que no perjudicaba.
Nunca jugué en Bolivia. Como entrenador, recuerdo que en febrero de 2004 llegamos a La Paz un par de horas antes del partido ante Bolívar, que perdimos 3-1 por la Copa Libertadores. Me dijeron que los que menos sufren la altura son los asmáticos. Tuve la experiencia de dirigir a Rolando Schiavi, que es asmático y aquella vez disputó los 90 minutos. Pero no es parámetro: el Flaco jugó con peritonitis y otros contratiempos, “no es un ser humano”.
ECUADOR (20 puntos / 10 partidos)
Si tenemos en cuenta el amistoso que jugó ante El Salvador en su fecha libre (5-1), marcó la nada despreciable suma de 9 goles en dos partidos.
El conjunto de Rueda se encuentra en una situación ideal: habiendo quedado libre, le llevan 5 puntos a Chile y Venezuela, que aún deben descansar una jornada. Empezó mal contra un Paraguay que se juega los últimos boletos, pero reaccionó a tiempo para conquistar un 4-1 inapelable.
Con grandes valores como Antonio Valencia, Felipe Caicedo y Jefferson Montero, entre otros, el Tricolor se consolidó como escolta de Argentina y se ilusiona con retornar a la Copa del Mundo. Además del roce y la categoría de sus jugadores, vale remarcar su poderío como local, donde triunfó en sus seis presentaciones.
COLOMBIA (19 puntos / 10 partidos)
Relajado luego del 5-0 sobre Bolivia en Barranquilla, prácticamente un entrenamiento, el conjunto de Pekerman fue a Puerto Ordaz con un solo punta de arranque, con la idea de conquistar un resultado positivo, pero sin desplegar todas las velas.