Kaká va a tener que potenciar la musculatura de su rodilla
Kaká quiere quedarse en el Madrid y para ello está realizando un trabajo especial en el gimnasio. Se trata de ejercicios basados en la propiocepción. El brasileño busca fortalecer y potenciar su maltrecha rodilla izquierda, que ha sufrido dos operaciones en los últimos cinco años. La propiocepción consiste en una serie de ejercicios realizados principalmente sobre superficies de cierta inestabilidad (colchonetas, camas elásticas…), con los que se evita el riesgo de lesiones, además de ser importantes para ganar esa velocidad que le exige Ancelotti.
El brasileño se enfrenta en Los Ángeles a un examen final. Tras cuatro años de bajo rendimiento, Ancelotti ha sido claro con él: o alcanza su mejor nivel o podría salir este verano. De ahí que la gira por Estados Unidos sea determinante. El italiano explicó su situación: “Necesita un trabajo diferente porque tiene que mejorar la velocidad. Ha empezado dos días antes un trabajo individual y vamos a ver qué pasa. Su condición física va a mejorar. Tiene mucha motivación y ganas de hacerlo mejor”. Ancelotti confía en él, pero no a cualquier precio: “Primero quiero verle entrenar y después decidiré”, dijo el técnico en su presentación. Los días pasan para Kaká y su fecha límite es el 11 de agosto, día en el que el Madrid concluye la gira americana.
Ha sido operado dos veces: en 2008 y en 2010
Kaká ha pasado un calvario con la rodilla izquierda. En 2008, en su último año como milanista, tuvo que ser operado en Río de Janeiro por el médico de la selección brasileña, José Luis Runco. Dos años después, ya en el Madrid, jugó el Mundial con molestias y nada más llegar a la pretemporada en Los Ángeles decidió operarse. Esta vez la intervención quirúrgica tuvo lugar en Amberes (Bélgica) y la realizó Marc Martens, una eminencia en la materia. Tras la operación, Kaká permaneció cuatro meses de baja, pero su rendimiento continuó siendo tan irregular como en su primera campaña de madridista y jamás alcanzó el nivel que llevó al Madrid a pagar 67 millones de euros en 2009. Ahora Kaká trabaja en el gimnasio para fortalecer una rodilla que no le ha permitido volver a alcanzar su mejor nivel.
