Klose, un gol histórico en un partido inolvidable
El 8 de julio de 2014, los espectadores que acudieron al estadio Mineirão de Belo Horizonte presenciaron un hito sin precedentes en la historia del fútbol mundial. Si se hubiera tratado de una película, el guión de los acontecimientos se habría hecho merecedor de un Óscar.
Y es que, por mucho que pase el tiempo, los aficionados al fútbol siempre recordarán dónde se encontraban el día en que Alemania se impuso a Brasil por 7-1 en la semifinal de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™. Tan extraordinario y sorprendente resultó aquel partido que hasta los más versados en la historia de la Copa Mundial de la FIFA se quedaron boquiabiertos al contemplar la goleada más abultada registrada en una semifinal mundialista, un hito que pasó a conocerse popularmente como el Mineirazo.
La guinda del triunfo de una Alemania que acabaría proclamándose campeona del mundo la puso Miroslav Klose al anotar el gol que supuso el 2-0 en aquel choque. El ariete germano sumaba así su 16º tanto en un partido de la Copa Mundial de la FIFA y superaba por tanto como máximo goleador mundialista al brasileño Ronaldo, que casualmente se encontraba en las gradas del estadio siguiendo el duelo. “Es un logro extraordinario y me alegro mucho por él”, declaró aquel día el seleccionador alemán Joachim Loew.
El jugador
La carrera de Klose se había iniciado 16 años antes en el FC Kaiserslautern. Sólo un año después de estrenarse como profesional, el delantero de origen polaco debutaba ya con la selección alemana. Tras labrarse un nombre con la elástica de los Diablos Rojos renanos, Klose ganó la Bundesliga con el Werder Bremen y se proclamó además máximo goleador del campeonato germano. Posteriormente, el ariete recaló en las filas del Bayern Múnich, donde ganó dos Ligas, dos Copas, una Copa de la Liga y una Supercopa alemanas. En 2011 fichó por el Lazio de Roma, con el que conquistó una Copa italiana.
En Brasil 2014, Klose, que tiene actualmente 38 años, contribuyó a que la Mannschaft conquistase su cuarto título mundialista. Anteriormente, el ariete se había proclamado subcampeón y segundo máximo goleador de la Copa Mundial de la FIFA Corea/Japón 2002™. Cuatro años más tarde, en Alemania 2006, Klose y la selección anfitriona tuvieron que conformarse con el tercer puesto, aunque el delantero se adjudicó la Bota de Oro de adidas que lo distinguió como máximo realizador de aquel certamen. En Sudáfrica 2010, el atacante y Alemania volvieron a subirse al tercer escalón del podio. Además, Klose defendió los colores del combinado alemán en las Eurocopas de 2004, 2008 y 2012. En la edición de 2008, el goleador y Alemania alcanzaron la final, pero sucumbieron a manos de España.
“Ganar el Mundial de Brasil supone para mí hacer realidad un sueño de la infancia, así que, a mi modo de ver, no puede haber mejor momento para poner fin a mi periplo con la selección”, declaró Miroslav Klose en agosto de 2014, cuando anunció su decisión de dejar el combinado alemán tras 137 partidos y 71 goles como internacional. El delantero colgó las botas definitivamente en noviembre de 2016. Pocas semanas antes visitaba el Museo de Fútbol Mundial de la FIFA y recordaba su récord y sus éxitos con la Mannschaft.