La esposa de Duncan pide el divorcio alegando que el jugador es bisexual
Estados Unidos vive estos días con especial interés el culebrón en que se ha convertido el divorcio de Tim Duncan, cuyo último episodio son las presuntas alegaciones de su esposa Amy de que la principal causa de la ruptura es la bisexualidad del jugador de los San Antonio Spurs. Según la que ha sido la mujer de Duncan durante los últimos doce años, el pívot mantiene desde hace largo tiempo una relación paralela con otro hombre.
Siempre según Amy, de 35 años, su marido, de 37, conoció a su amante durante su etapa universitaria en Walke Forest, entre 1993 y 1997. Después los dos hombres vivirían juntos durante cuatro años y esa situación se mantuvo incluso con Tim y Amy ya como marido y mujer, pues ese hombre vivió durante los dos primeros años del matrimonio bajo el mismo techo que la pareja. Después la estrella de los Spurs le compró un apartamento para proseguir más discretamente la relación.
A dos bandas
Los rumores sobre la separación de los Duncan se iniciaron hace meses, cuando trascendió que el jugador había contratado a un detective privado para obtener información sobre la vida privada de su mujer fuera del hogar familiar. Al parecer Amy, propietaria de algunos gimnasios, mantiene una relación desde hace dos años con uno de los preparadores físicos que trabajan para ella.
Sin embargo, fue ella la que inició los trámites de divorcio el pasado mes de marzo, aunque después la pareja aceptó retrasarlos hasta 30 días después de la conclusión de la temporada NBA. En su demanda de divorcio Amy calificó el matrimonio como “insoportable” a causa de los constantes conflictos entre ambos.
Según parece, Duncan impuso una cláusula de confidencialidad en las negociaciones de divorcio para evitar que salieran a la luz informaciones relativas a su presunta bisexualidad, algo que finalmente no ha conseguido. El jugador no ha realizado ninguna declaración posterior a la publicación de estas informaciones ni las que se refieren al proceso de divorcio.
Según una fuente del portal Enstarz.com, “Amy trató a Tim como una mierda durante su matrimonio ya que sabía que su marido tenía una relación con un hombre. Tim sabía que ella le engañaba con otro, pero lo aceptaba porque no quería que ella desvelara su orientación sexual”.
Tim y Amy tienen dos hijos, Sydney, una niña de ocho años, y Draven, un chico de seis.