La selección charrúa vive un momento muy particular
Fernando Muslera, el portero titular inamovible de la selección mayor de Uruguay, lo dijo entre risas en conferencia de prensa. El combinado necesita obtener 4 de los 6 puntos en disputa. Se refería a los dos duros compromisos que tendrá la selección celeste en la fase de clasificación para el Mundial 2014 que afronta en apenas una semana.
La selección charrúa vive un momento muy particular. Recuperó la sonrisa en la Copa de las Confederaciones, donde acabó en la 4ª posición por detrás de Brasil, España e Italia, y días más tarde volvió a demostrar en fecha FIFA que la memoria futbolística está fresca, cuando derrotó claramente a Japón en su tierra.
Sin embargo, un poco más acá en cuanto a geografías y calendario, su andar en las eliminatorias no está exenta de preocupaciones. Mirando la tabla de clasificación, ocupa el quinto puesto. Esto significa que hoy debería jugar la eliminatoria de repesca y, para ello, los uruguayos han comenzado a estudiar el nombre del aeropuerto y otras características de Uzbekistán, la selección asiática que está en posición de repesca. Pero esa quinta posición no es segura, como tampoco lo es el 4° puesto, compartido por Chile y Ecuador con 21 puntos.
Históricamente a Uruguay le son más esquivas las eliminatorias sudamericanas que la Copa América o los propios mundiales. Así, entre selecciones de menor linaje y comprobado menor potencial futbolístico -ya sea individual o grupal- ha perdido posibilidades. La celeste quedó fuera de Argentina 78, y cuatro años más tarde repitió su ausencia en España 82. Ya repitió errores y resultados negativos en el camino a USA 94, y no pudo corregir para Francia 98. Y dolorosa fue la eliminación de Alemania 2006. Para cualquier uruguayo que se precie de tener 40 años de edad son muchos Mundiales vistos sin presencia de la casaca color cielo, y ese fantasma de ausencias sobrevuela el Estadio Centenario y sus alrededores desde que el equipo de Tabárez comenzó a perder puntos y terreno en el camino de Brasil.
Las posibilidades
El ‘gran’ resultado que catapultó ilusiones y puntuación fue el triunfo como visitante ante Venezuela. Esos tres puntos, que en décadas pasadas se consideraban en adición, pasaron a ser muy duros desde los últimos 15 años a esta parte. Por ello el festejo fue alborozado tras la conquista en costas del mar Caribe. Así y todo, Uruguay está necesitada de triunfos y tranquilidad. Le soplan la nuca las selecciones de Perú -rival directo este 6 de septiembre en Lima, con estadio lleno- y la propia Venezuela.
¿Y el calendario?, indudablemente favorece al equipo del maestro Tabárez. Depende de sí mismo ante Perú aunque jugando en condición de visitante, mientras que recibe a Colombia en el Centenario de Montevideo cuatro días más tarde, cuando Perú y Venezuela se sacarán los ojos entre sí en la decimosexta jornada. Toda esta amalgama de puntos, posibilidades y fechas se sabe y trabaja desde el complejo Uruguay Celeste, donde la selección uruguaya se prepara antes de partir hacia Lima. Desde allí el director técnico ha aportado tranquilidad y ha tenido la habilidad verborrágica de pasarle la presión al rival. “Estamos con un poco más de aire que Perú”, dijo el maestro, y así la pelota pasó a la cancha de otro técnico uruguayo, Sergio Markarián, el mismo que había declarado que si Perú obtenía los 6 puntos en la doble fecha “iba al Mundial, lo firmo”.
A favor celeste están las estadísticas, la historia, las figuras goleadoras en racha -como Forlán y Suárez y Lodeiro y Cavani- y un presente que retomó la senda del buen juego mostrado en Sudáfrica 2010. Eso lo sabe Tabárez, que eligió casi al cien por ciento de los jugadores que estuvieron en el último Mundial FIFA. Todo dependerá de la memoria y de los próximos 180 minutos de la doble fecha FIFA si quiere estar en el Mundial tan cercano.