Los Wizards incendian Chicago
Definitivamente, los Washington Wizards son la primera gran sorpresa de estos Playoffs. Los capitalinos vencieron otra noche más en el United Center de Chicago (99-101) y se vuelven a casa con un 0-2 en el bolsillo. Tanto habíamos elogiado a los chicos de Thibodeau que olvidábamos el talento, el joven y gran talento, que tienen los niños de D.C. Y es que en el fondo son sólo niños. Chicos como John Wall y Bradley Beal, que suman 43 primaveras entre ambos, guiados por un gigante brasileño en la pintura:Nené Hilario. Ahí nacen sus virtudes y mueren sus carencias. Si la rodilla de Nené aguanta lo suficiente como para parar a Joakim Noah y ajusticiarlo en su zona, los Wizards tendrán mucho ganado.
De Washington hay que reconocer ese paso adelante de Beal y Wall. No en cuanto a estadísticas, que siempre han estado ahí, sino en cuanto a ‘momentos’. Perdían de siete (87-80) a falta de cinco minutos y apareció Bradley Beal (acabó con 26) para anotar nueve puntos consecutivos (dos triples, una suspensión y un tiro libre) y empatar el encuentro a 91. John Wall había anotado 14 puntos antes del descanso.
El partido, y la serie, se resume en los últimos cinco segundos de la prórroga. Tres canastas de Nené habían puesto a los Wizards seis arriba, pero Gibson y Noah redujeron la distancia a dos.Kirk Hinrich avanza hacia canasta y recibe falta de Nené. Tiene dos tiros libres para volver a empatar el encuentro a dos segundos del final. Falla el primero, tira a fallar el segundo y Ariza coge el rebote. Se acabó. Kirk Hinrich tiene un 80% de porcentaje de acierto desde la línea de tiros libres en su carrera, pero falló uno de los más importantes de su vida.
Y es que todo por lo que han luchado los Bulls este año y todo contra lo que lo han hecho, se ha desvanecido casi por completo en 100 minutos. A pesar de la lesión de Rose, a pesar del traspaso de Deng y a pesar del mal momento de Boozer (sólo 21 minutos hoy), ‘Thibs’ se inventó a D.J. Augustin, a Dunleavy y a Taj Gibson. Tres benditas soluciones para llevar al equipo a la cuarta posición del Este pero que quizás no sean suficientes en Playoffs. Y me explico.
D.J. Augustin metió 25 puntos y Taj Gibson otros 22, sumando además 10 rebotes. Espectaculares una noche más. Pero en la prórroga, en el momento clave de un encuentro a vida o muerte, tuvo que jugarse las ‘bolas calientes’ Kirk Hinrich. Así fue la serie de tiro de los Bulls en el tiempo extra: Hinrich (fallo), Butler (fallo), Gibson (fallo), Hinrich (fallo), Gibson (fallo), Hinrich (fallo), Gibson (fallo), Gibson (anota) y Noah (anota). Es decir, D.J. Augustin, el máximo anotador del equipo, no se jugó ningún tiro. La teórica estrella, Noah, sólo uno. Tuvo que aparecer Gibson, que pide a gritos el premio a mejor Sexto Hombre, para no dar por perdido el encuentro. Hinrich, tres tiros, tres fallos. Y los dos tiros libres del final…
Muchos analistas de Chicago echaban hoy de menos, lógicamente, a Derrick Rose. E iban más allá: Carmelo Anthony. Melo está viendo por la televisión el naufragio de un equipo que sueña con él y que hoy le quiere más que nunca.
Sólo tres equipos han levantado un 0-2 con factor cancha a favor
En la historia de la NBA, sólo 16 equipos han levantado un 0-2 y, de esos, sólo tres lo han hecho con factor cancha a favor. En negrita los que tenían el campo para ellos:
Boston (vs. Los Angeles), 1969, Finales.