Ni sufre ni luce, México camina firme rumbo a Rusia 2018
La Selección Mexicana puso un pie en Rusia 2018. El combinado mexicano venció 1-0 a Trinidad y Tobago para sostener la cima del hexagonal en la cuarta de 10 Jornadas y así enfilarse a la Copa del Mundo. De paso, terminó con otra mala racha para confirmar a Juan Carlos Osorio como un exterminador de ese tipo de fantasmas.
Sin lucir, con un juego por momentos adormilado y lleno de imprecisiones por parte de ambas selecciones, el Tri supo aprovechar la que tuvo cuando Diego Reyes se levantó en el área y remató un tiro de esquina para el 1-0 definitivo al 58′ que apagar a una afición trinitaria por momentos impetuosa pero que ni siquiera llenó su estadio.
La visita al extremo sur del Caribe no fue tan hostil e incluso parece que las épocas de sufrimiento por clasificar a un Mundial quedaron atrás. Con el triunfo de esta noche en Puerto España, la Selección Mexicana llegó a 3 triunfos esta Fase, dos de ellas de visita. En cuatro partidos tiene 10 puntos y está a una sola unidad de emular lo que hizo en todo el hexagonal anterior, cuando sufrió hasta el límite y obtuvo el boleto en el repechaje. Ahora, los tres partidos consecutivos que tendrá en casa entre junio y septiembre ponen la mesa para asegurar el Mundial con toda la anticipación que faltó para Brasil 2014.
Osorio no dejó de lado las rotaciones y, con cinco modificaciones respecto al triunfo del viernes en el Azteca, ahora debutó a Luis Reyes y Jesús Gallardo en eliminatoria, el primero como titular, entre las otras novedades: Talavera, Molina, Diego Reyes y Raúl Jiménez, sacrificando a Ochoa, Oribe, Jonathan dos Santos, el lesionado Rafa Márquez e, inexplicablemente, a Carlos Vela, porque este último, el de mayor virtuosismo de todo el plantel, simplemente está en su momento.
El factor suerte también estuvo del lado del Tri. El asistente uno del partido cometió un gran error al señalar un inexistente fuera de lugar de Joevin Jones al minuto 31, cuando entró por izquierda y metió un riflazo para mandarla al fondo ante la algarabía local que pronto apagaron los jueces.
Además del gol de Reyes, el Tri solo tuvo una más con Héctor Herrera, quien metió un disparo al poste, así como una llegada que Chicharito no pudo concretar e impidió rebasar de una vez a Borgetti como máximo goleador del Tri. Entonces Osorio apostó al equilibrio con Vela de cambio ante el lesionado Jiménez, con Orbelín Pineda como escudo para sostener el marcador y Gallardo ante el duro golpe que se llevó Salcedo.
El Tri es más líder que nunca del hexagonal, rompió la mala racha en Trinidad y Tobago, y puso un pie en Rusia 2018 con la tranquilidad que desde el ciclo para Alemania 2006 no se vivía. Así le dice adiós a los últimos fantasmas. El paso siguiente será buscar atrevimiento y espectáculo.