Pirlo y Buffon, de nuevo juntos al servicio de la Azzurra

Una campaña impecable en la competición preliminar de la zona europea, un ciclo marcado por los resultados positivos y la moral alta antes de la Copa Mundial de la FIFA™. Sobre el papel, la selección italiana de Cesare Prandelli que llega a Brasil 2014 podría compararse perfectamente con la de 2010, de no ser por una diferencia importante: al contrario que en la última cita mundialista, Gianluigi Buffon y Andrea Pirlo están de nuevo juntos, en forma y listos para liderar a la Azzurra.

Hace cuatro años, ese “pequeño detalle” fue precisamente lo que le faltó al equipo dirigido por Marcelo Lippi, que llegaba a Sudáfrica con la aspiración de defender el título conquistado en 2006, hasta que perdió a su director de orquesta en el mediocampo antes del torneo y al histórico arquero en el primer partido. Fue un revés demasiado duro para el equipo, que acabó despidiéndose sin conseguir ninguna victoria y con una frustración que resuena todavía hoy.

“En el último Mundial tuvimos muy mala suerte al perder a nuestros dos jugadores más importantes por lesión. Eso acabó influyendo negativamente en la campaña”, recuerda el central Giorgio Chiellini en declaraciones a la FIFA. “Así que ahora, con ellos de nuevo en forma, esperamos poder llegar más lejos, a pesar de estar en un grupo difícil”.

Y más aún que la importancia de ambos dentro de la cancha, su influencia podrá observarse en el aspecto psicológico. Al fin y al cabo, fue un día 9 de julio de 2006, en Berlín, cuando Pirlo y Buffon estuvieron juntos en el campo por última vez en un Mundial de la FIFA, en el mismo partido en el que Italia venció a Francia en los penales y alzó su cuarto título. Es una combinación que no solo aporta moral a los italianos, sino que preocupará a buen seguro a Inglaterra, rival de este sábado en Manaos, en el encuentro que da inicio al Grupo D.

Ocho años después, Pirlo y Buffon siguen rindiendo a muy alto nivel en el Juventus, y son los principales exponentes de una Azzurra que, aunque todavía tenga cuentas que ajustar en el torneo, ha recuperado al menos su reputación desde la llegada de Prandelli, en 2010, con campañas exitosas en la UEFA EURO 2012 (de la que fue subcampeona) y en la última Copa FIFA Confederaciones (con el tercer puesto).

“Pirlo y Buffon son nuestros jugadores más importantes. Tienen personalidad y hacen que todo el equipo juegue. Así que hay que cuidar bien de ellos”, añade Chiellini, algo con lo que coincide Claudio Marchisio, otro compañero suyo en la Vecchia Signora. “Tengo el privilegio de jugar y de aprender con ellos, sobre todo con Pirlo, que me ha enseñado mucho en esta posición. Son los pilares de este equipo desde hace cuatro años, y serán importantísimos en un torneo como el Mundial”.

Equilibrio de fuerzas
Al mismo tiempo que Buffon y Pirlo regresan al certamen como puntales de Italia, Prandelli sigue apostando por hombres como Andrea Barzagli, Daniele De Rossi —otros veteranos del título de 2006—, Chiellini y el propio Marchisio. Para el seleccionador, de 56 años, esta base experimentada es precisamente lo que ha permitido llevar a cabo una renovación gradual del plantel en los últimos años.

Así, aunque la confianza en ellos siga siendo incondicional, el técnico tiene muchas esperanzas depositadas en recientes incorporaciones, como los delanteros Ciro Immobile y Lorenzo Insigne y el defensor Matteo Darmian.

“Es evidente que jugadores como Pirlo y Buffon son esenciales para cualquier entrenador, por la calidad que tienen y la actitud que muestran. Pero también es positivo contar con el entusiasmo y la creatividad de otros más jóvenes, que siempre han soñado con jugar un Mundial”, explica Prandelli a la FIFA. “Ellos aportan un poco de irreverencia, y pueden hacer algo inesperado. Nuestro equipo está rejuvenecido, y eso es precisamente lo que queríamos para este Mundial”.

Con esta mezcla y con el ánimo renovado, Italia espera evitar los tropiezos sufridos en el Mundial de 2010 y poder seguir el buen camino iniciado hace cuatro años, empezando por el duelo contra un viejo rival, en una reedición del choque de cuartos de final de la Eurocopa 2012, en el que la Azzurra se impuso en los penales. Aun así, será un reencuentro distinto, sin tantos desquites, y con muchas caras nuevas.

“El equipo es ligeramente más joven que el de la Eurocopa, pero creo que en ese aspecto Inglaterra ha cambiado todavía más”, concluye Chiellini. Para él y sus compañeros de la selección italiana, no habrá pues nada mejor que estar en el mismo bando que los dos experimentados campeones del mundo, y poder contar con ellos dentro del campo.