¿Será 2016 el año del fútsal sudafricano?
El norte de África viene ejerciendo un dominio absoluto en el fútsal africano y, salvo un par de excepciones, todos los representantes de África en la Copa Mundial de Fútsal de la FIFA provenían de esa región. Fue allá por 1989 y 1992, cuando Zimbabue y Nigeria, respectivamente, defendieron el pabellón del Continente Madre en la cita mundialista –en ambos casos, no obstante, invitados a participar por la organización–.
Desde entonces, Egipto ha estado omnipresente en los Mundiales de fútbol sala. La primera en acompañarle fue Libia, cuando en 2008 aumentaron a dos las plazas asignadas a África. Y cuatro años después, cuando pasó a haber tres representantes africanos, se incorporó Marruecos.
Del 15 al 24 de abril, las ocho mejores selecciones africanas de la especialidad se darán cita en Sudáfrica para disputar la 5ª edición de la Copa Africana de Naciones de Fútsal, y los anfitriones son moderadamente optimistas sobre sus opciones de poner fin a la hegemonía norteafricana en la competición.
Con ese propósito, los directivos sudafricanos han puesto todo de su mano para garantizar que el equipo lo haga bien, y el sorteo también ha sido favorable, ya que los locales evitarán a Egipto, Libia y Marruecos en la fase de grupos. En su lugar, Sudáfrica se las verá con Mozambique, Zambia y Túnez en el Grupo A, mientras que Angola completará el Grupo B junto a los tres combinados presentes en Tailandia 2012.